La FABZ manifiesta su profunda preocupación por el contenido de las tres consultas públicas abiertas por el Ayuntamiento de Zaragoza, previas a la elaboración de la Ordenanza de Movilidad Urbana Sostenible, de la Ordenanza de Zona de Bajas Emisiones y del Reglamento del Servicio de Estacionamiento Regulado por la involución y regresión manifiesta que se deriva de las mismas.
No nos cansaremos de reivindicar la validez y vigencia del PMUS, aprobado por unanimidad
en abril de 2019 por el Ayuntamiento de Zaragoza tras varios procesos de análisis técnico, participación ciudadana y debate político, y que contiene los principios básicos y programas de actuación en los que debería basarse la movilidad de la ciudad (normativas, medidas o actuaciones), y que responden a la casi totalidad de las preguntas planteadas en las tres consultas.
Estas consultas públicas previas son preceptivas, lo que no es óbice para que, una vez más, exijamos encarecidamente verdaderos procesos de participación que enriquecerían los resultados finales de las mismas e implicarían a la población, no quedándose en un mero trámite a cumplir, con sistemas menos farragosos que faciliten dicha participación.
Si dichas consultas públicas son un requisito indispensable para la obtención de determinadas líneas de financiación, fundamentalmente fondos Next Generation, instamos al Ayto. a que amplíe el plazo hasta final de año y a que, en futuras ocasiones, abra plazos más amplios para poder dar respuesta a las mismas pues los 15 días naturales son insuficientes, lo que se traduce en pérdida de calidad tanto de la participación ciudadana como del resultado final obtenido.
Si entramos al tenor de las preguntas a contestar para participar en las consultas nuestra
preocupación crece pues se pone en cuestión incluso el propio papel a desempeñar por el
Ayto. como entidad pública que tiene unas obligaciones/deberes ineludibles que cumplir para con sus vecinas y vecinos. La mera formulación de alguna de las preguntas parece increíble, en otras la respuesta es obvia y en otras son directamente incongruentes y/o fuera de lugar.
La FABZ también se pregunta si es casualidad sacar las tres consultas a la vez, el modo
de plantearlas, el plazo dado,…o si se esconde detrás algo más. Sorprende que
conteniendo el vigente PMUS una estrategia sobre el uso del vehículo privado, donde
se marcan como objetivos generales disminuir el número de vehículos privados
circulando, reducir la contaminación atmosférica y acústica, o reequilibrar y
redistribuir el espacio público disponible, sea este el medio más reseñado, quizás
tendenciosamente, en las preguntas planteadas para participar en las consultas.