Santiago Bajo, Presidente de la Asociación de Comerciantes de San José

Ignacio Lasmarías, Presidente de la Asociación Vecinal de San José

Dos personas vinculadas con San José: uno vecino y presidente de la Asociación de Vecinos, y otro comerciante y presidente de la Asociación de Comerciantes. Los dos preocupados por algo que nos puede afectar negativamente: la implantación de grandes superficies en la periferia de la ciudad y su repercusión en nuestro barrio y nuestro comercio.

Los dos recordamos cuando se cernía la amenaza de grandes desarrollos urbanísticos en el sur de la urbe,  “arcos del triunfo” hoy convertidos en páramos de la ciudad y soledad de sus moradores. Recordamos ambos el estallido de augustas plazas y puertos, faraónicos centros comerciales y de ocio, que transformarían la forma de vivir y sentir de los zaragozanos, al tiempo que revitalizarían la economía y el empleo de Ceasaraugusta, hoy convertidos en miles de metros de locales y aparcamientos vacíos.

Se dice que el hombre es el único animal capaz de tropezar dos veces con la misma piedra. Parece que no aprendemos y que volveremos a las andadas. Siendo Zaragoza la ciudad española con más metros de gran superficie comercial por habitante, ¿en qué cabeza cabe la aprobación por nuestros concejales de otro macropoyecto? Viendo la multitud de tiendas cerradas en avenidas y calles como San José, Tenor Fleta, Miguel Servet o Reina Fabiola, ¿en qué cabeza cabe legalizar la implantación de nuevos establecimientos a kilómetros y kilómetros de nuestros barrios?

No dudamos de la legitimidad de propietarios de suelos y promotores de proyectos para incrementar su patrimonio. Pero tampoco dudamos de la legitimidad y la imperiosa obligación de nuestros representantes municipales a la hora de defender el interés general de la ciudad, en aras a la obtención del bien común, el de todos.

Hace unos meses las asociaciones de vecinos y comerciantes de San José elaboramos, conjuntamente, un estudio del comercio de proximidad en el Distrito que arrojó datos reveladores. Tras el inicio de la crisis económica, el 98% de los establecimientos declaraban pérdida de beneficios, el 49% la disminución de personal y casi el 15% el traspaso o cierre del negocio. Otros datos ilustrativos desvelan que el 41% de los consumidores superan los 65 años o que el 45% de los consumidores ya adquiere fuera del barrio ropa, calzado y complementos. ¿Qué más decir?

Unos barrios vivos, sostenibles y cohesionados exigen el apoyo del comercio de cercanía como elemento esencial para su supervivencia. Mejor prevenir antes que curar, lo contrario significará dejarlos en el total abandono. Parafraseando al Gran Combo de Puerto Rico y su popular y salsero tema musical “No hay cama pa tanta gente”,  en Zaragoza y en sus barrios “no hay negocio pa tanta gente”.

Rogamos, señoras y señores concejales, en nombre de los vecinos y comerciantes de San José que recapaciten a la hora de ejercer su voto respecto a la aprobación de nuevas grandes superficies y como dice el refrán no tropiecen dos veces en la misma piedra… y no recalifiquen una vez más.