La Iniciativa Ciudadana Europea “Right2Cure”, de la que forma parte la Confederación Estatal de Asociaciones Vecinales (CEAV), denuncia las irregularidades de Pfizer – Astrazeneca y exige a la Unión Europea la declaración de licencias obligatorias
La primera Iniciativa Ciudadana Europea sobre salud que pretende liberar las patentes de los medicamentos para luchar contra la covid-19 asegura que hay pasar de las palabras a los hechos y le pide a la UE valentía frente al chantaje del Big Pharma
Una amplia coalición europea formada por colectivos sociales, sindicatos, asociaciones de defensa de la sanidad pública, entidades de la sociedad civil y expertos en salud pública englobados en la Iniciativa Ciudadana Europea “Right2Cure” han denunciado hoy “los retrasos en los suministros de vacunas anunciados por Pfizer y AstraZeneca”. De igual manera, han exigido a la UE que acabe con estos monopolios utilizando la declaración como licencia obligatoria de las diferentes vacunas aprobadas por la Agencia Europea del Medicamento para asegurar su distribución.
La iniciativa tiene claro que “el problema es que el enfoque para la estrategia de vacunación de la UE no ha pretendido realmente hacer de las vacunas un bien público global, sino tratar de resolver su problema, según el viejo esquema de sálvese quien pueda. Ha cedido a los planteamientos de la industria, y lo que debían ser productos sin patente, compartiendo el conocimiento, se han transformado en propiedad privada.”
Uno de los objetivos de la iniciativa en marcha es obligar a la Comisión Europea a desarrollar todas las medidas necesarias para garantizar que los derechos de propiedad intelectual, como patentes o licencias, no limiten la disponibilidad de tratamientos y vacunas contra COVID-19 cómo está ocurriendo en estos momentos.
Desde Right2Cure España creen que “en estos momentos estamos sufriendo lo que ya denunciábamos con anterioridad y es que si los contratos son opacos, carecen de transparencia, al final las empresas farmacéuticas tienen todo el poder haciendo rehenes a la ciudadanía”. Recuerdan a la Unión Europea que “los retrasos en el suministro de vacunas significan vidas, y eso no es solamente responsabilidad de las empresas, sino, más aún, de la propia UE y los gobiernos que han favorecido esa estrategia y firmado esos contratos. La UE y los gobiernos han negociado y firmado entre otras cosas que, si hay efectos secundarios, o si las vacunas no son eficaces, las indemnizaciones, tanto por fallos en la investigación, la fabricación, o la distribución, serán asumidas por los Estados miembros, es decir, por los y las contribuyentes.”
“Es el momento de tomar decisiones que manden un mensaje claro a las grandes farmacéuticas: con la salud de las personas no hay negociación posible y no puede haber beneficios con la pandemia. La declaración de licencias obligatorias para las vacunas en la UE es posible ya que la propia Unión Europea es parte de la Declaración de Doha sobre salud pública y acceso a tratamientos. Sólo hace falta pasar de las palabras a los hechos e impedir que el Big Pharma siga chantajeando a la ciudadanía”.
0 comentarios