• Éxito de la convocatoria de la Asociación Vecinal para pedir que se le dé una solución al establecimiento de Concha Guisado en el barrio

Decenas de personas se concentraron este domingo por la mañana contra el cierre de la churrería de Concha Guisado en Casetas. Fue una convocatoria impulsada por la Asociación Vecinal del barrio, después de que el Ayuntamiento de Zaragoza enviara hace unas semanas a la propietaria de este establecimiento una orden de clausura por carecer de la licencia para ejercer esta actividad.

Además de la iniciativa de apoyo de este domingo, ya se han recogido más de 4.000 firmas a través de la plataforma Change.org. Se puede participar accediendo a este enlace. 

Emocionada por las muestras de cariño de sus vecinos, Guisado agradeció el apoyo para impedir que se cierre su negocio, que ha sido la principal fuente de ingresos de la familia desde hace más de 30 años.

En vías de solución

La presidenta de la Asociación Vecinal, Isabel Vaquero, agradeció el apoyo recibido por el barrio para que Concha se siga ganando la vida: «Tenemos que conservar lo poco que tenemos», defendió. Y anunció que el problema podría solucionarse en breve, ya que el Área de Servicios Públicos ha anunciado que buscará una medida transitoria para Concha, como la cesión del suelo en precario, mientras se regulariza la concesión mediante concurso público. 

Isabel Vaquero hizo hincapié en la necesidad de que se contemple la singularidad de los barrios rurales y en seguir luchando por su futuro. La representante vecinal agradeció el apoyo de la junta, aunque este problema se remonta a septiembre.

La Junta de Casetas presentará una moción en el próximo pleno para solicitar la cesión de este suelo público para que la churrera pueda seguir trabajando.