Entre los asistentes al encierro en la Federación de Asociaciones de Barrio de Zaragoza ha causado sorpresa las manifestaciones del Gobierno de Aragón vertidas en el Heraldo de Aragón que recurre a una entrevista de hace dos años con el Presidente de la Comunidad para justificar la negativa de su Consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente a recibirlos en este momento.
En dos años han pasado muchas cosas, entre ellas que el Gobierno de Aragón se haya constituido bajo el compromiso de derogar el ICA y alcanzar una financiación justa, razonable y sostenible. No parece ninguna exigencia desorbitada que quien ha elaborado una propuesta de financiación del PASD con el apoyo de una buena parte de la ciudadania, pueda ser cuando menos testigo en la interlocución para alcanzar un nuevo escenario en el saneamiento aragonés.
La RAPA no ha sido nunca amenaza para el Gobierno y si uno de sus consejeros se siente amenazado por la participación ciudadana, el consejero tiene un grave problema y los aragoneses una consejería que actúa inadecuadamente.